Se proponen dos dispositivos, uno consiste en generar una pequeña superficie curva de revolución respecto de un punto central que representa un planeta. Esta superficie debe tener una pendiente a modo de embudo pero de valor dependiente del radio intentando simular la atracción gravitatoria (proporcional a 1/dist2) . De esta manera, si se lanza una esfera rodando sobre la superficie en forma perpendicular al radio y con la velocidad correcta, deberá describir una órbita circular.Si la velocidad es menor, describirá una órbita elíptica con apogeo en el punto de lanzamiento y si es mayor, con perigeo en el punto de lanzamiento.Si la velocidad es muy alta se podrían tener las trayectorias de escape parabólicas o hiperbólicas.
Está claro que la idea no representa una analogía perfecta (en el razonamiento despreciamos el momento de inercia de la esferita, confiamos en que la resistencia de rodadura y aerodinámica serán muy bajas, etc.), por esto, no se lograrán órbitas perfectas y evidentemente se “degradarán”, sin embargo, supongo que si se construye con cuidado, podría observarse claramente el efecto con evidente interés didáctico.
Otra idea consiste en utilizar una mesa de colchón de aire (el clásico juego de tejo) donde el planeta podría simularse con un electroimán y el satélite con un disco que “levite” sobre el colchón de aire y tenga adherida alguna pieza de material ferromagnético. Dado que la fuerza de atracción magnética tiene una ley de variación con la distancia similar a la gravitatoria, podrían simularse órbitas al igual que en el caso anterior.